PRUEBAS Y SUFRIMIENTOS EN LOS CRISTIANOS

 

PRUEBAS Y SUFRIMIENTOS EN LOS CRISTIANOS

                                                               

Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

Como cristianos muchas veces nos preguntamos, por qué tenemos que sufrir a pesar de que vivimos una vida en santidad, y nos hemos esforzado por vivir una vida que le agrade a Dios, pero tenemos que sufrir física y sicológicamente.

La verdad es que la biblia describe los sufrimientos que paso el señor Jesús, los apóstoles y muchos justos como Job. Todo tiene un sentido para Dios aunque nosotros muchas veces no lo lleguemos a entender mientras vivamos en esta tierra, solo en la eternidad lo lleguemos a entender.

Job 23:10 Mas él conoce mi camino;
Me probará, y saldré como oro.

Salmos 11:5 Jehová prueba al justo;
Pero al malo y al que ama la violencia, su alma los aborrece.

POOR QUE SUFREN LOS CRISTIANOS?

SUFREN PORQUE SON SERES HUMANOS EN LAS MANOS DE DIOS,

Los cristianos y aquellos que no conocen a Dios, muchas veces tendrán que pasar por sufrimiento, pues Dios  lo permite, él nos conoce y hace con  nuestra vida lo que él quiere, él sabe lo que nos conviene.

El hecho de que seamos cristianos no quiere decir que estamos exentos de pasar por cualquier sufrimiento; Si Dios así lo permite nos probara.

Job fue un hombre justo y sin embargo Dios permitió que satanás viniera y pusiera sufrimiento en su vida,  esto hizo que Job se mantuviera fiel a Dios a pesar de su dolor y su desdicha.

Job 1:8  —¿Te has puesto a pensar en mi siervo Job? —volvió a preguntarle el SEÑOR—. No hay en la tierra nadie como él; es un hombre recto e intachable, que me honra y vive apartado del mal.

Job 1:9  Satanás replicó: —¿Y acaso Job te honra sin recibir nada a cambio?

Job 1:10  ¿Acaso no están bajo tu protección él y su familia y todas sus posesiones? De tal modo has bendecido la obra de sus manos que sus rebaños y ganados llenan toda la tierra.

Job 1:11  Pero extiende la mano y quítale todo lo que posee, ¡a ver si no te maldice en tu propia cara!

Job 1:12  —Muy bien —le contestó el SEÑOR—. Todas sus posesiones están en tus manos, con la condición de que a él no le pongas la mano encima. Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del SEÑOR.

JOB SE MANTUVO FIEL A DIOS

Job 13:15 He aquí, aunque él me matare, en él esperaré;
No obstante, defenderé delante de él mis caminos,

Job 2:10 Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.

Dios está presente en todas parte, el gobierna nuestra vida y hay cosas que por más difíciles que parezcan se hacen según su voluntad. Nosotros como cristianos debemos agradecer a Dios y aceptar las cosas buenas y malas que nos suceden porque todo tiene un propósito.

Romanos 8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

POR NUESTRAS PROPIAS CONSECUENCIAS

Debido al pecado y la desobediencia los cristianos pasan por diferentes sufrimientos y angustias, pues es el resultado de nuestros propios actos.

Si somos personas llenas de ira, chisme, contienda, malos deseos sufriremos nuestras consecuencias.

Gál 5:19  Todo el mundo conoce la conducta de los que obedecen a sus malos deseos: no son fieles en el matrimonio, tienen relaciones sexuales prohibidas, muchos vicios y malos pensamientos.

Gál 5:20  Adoran a dioses falsos, practican la brujería y odian a los demás. Se pelean unos con otros, son celosos y se enojan por todo. Son egoístas, discuten y causan divisiones.

Gál 5:21  Son envidiosos, y hasta matan; se emborrachan, y en sus fiestas hacen locuras y muchas cosas malas. Les advierto, como ya lo había hecho antes, que los que hacen esto no formarán parte del reino de Dios.

Así como un niño malcriado necesita ser corregido, como cristianos tenemos que recibir la corrección de un padre amoroso que solo busca darnos lo mejor.

Hebreos 12:5 y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo:
Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor,
Ni desmayes cuando eres reprendido por él;
12:6 Porque el Señor al que ama, disciplina,
Y azota a todo el que recibe por hijo.
12:7 Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?
12:8 Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos.
12:9 Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos?
12:10 Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es provechoso, para que participemos de su santidad.
12:11 Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.

Si somos cristianos tenemos una responsabilidad como hijos de  Dios, en vivir una vida  en santidad.

Tenemos responsabilidad con nuestra familia, con  nuestros semejantes, con nuestra iglesia.

PORQUE NECESITAMOS CORRECCIÓN.

Las pruebas y los sufrimientos vienen, porque aunque muchas veces nos parece que estamos haciendo las cosas bien, y que estamos viviendo en santidad, no estamos agradando del todo a Dios y tenemos que ser disciplinados pues él si conoce  nuestro corazón.

Dios nos ama y el permitirá el sufrimiento en nuestras vidas, para moldearnos, pues somos sus hijos.

Apocalipsis 3:19 Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

PORQUE DIOS QUIERE QUE SEAMOS HUMILDES.

Dios permite el sufrimiento en nuestras vidas porque quiere que vivamos en humildad y sencillez.

Mateo 23:12 Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.

2 a corintios 12:7 Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera;

POR LA FE Y EL AMOR A CRISTO

Muchos tenemos que sufrir burlas, humillaciones, muerte,  tristeza por causa de Cristo.

Nuestra fe y nuestro amor a Cristo tienen que ser probado por las pruebas y dificultades.

Hebreos 11:36 Otros experimentaron vituperios y azotes, y a más de esto prisiones y cárceles.
11:37 Fueron apedreados, aserrados, puestos a prueba, muertos a filo de espada; anduvieron de acá para allá cubiertos de pieles de ovejas y de cabras, pobres, angustiados, maltratados;
11:38 de los cuales el mundo no era digno; errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas y por las cavernas de la tierra.
11:39 Y todos éstos, aunque alcanzaron buen testimonio mediante la fe, no recibieron lo prometido;
11:40 proveyendo Dios alguna cosa mejor para nosotros, para que no fuesen ellos perfeccionados aparte de nosotros.

EL CRISTIANO QUE ACEPTA LA DISCIPLINA DE DIOS

No es fácil aceptar el dolor y sufrimiento cuando decimos que conocemos a un Dios verdadero. Cuando venimos a Cristo solo esperamos las cosas buenas y nunca nos imaginamos que tal vez tengamos que pasar  por sufrimiento, para ser probados y disciplinados por el creador, pues él conoce nuestro corazón.

Si aceptamos la disciplina de Dios podremos decir como Job.

Job 23:10 Mas él conoce mi camino;
Me probará, y saldré como oro.

1Pe 1:7  La confianza que ustedes tienen en Dios es como el oro: así como la calidad del oro se pone a prueba con el fuego, la confianza que ustedes tienen en Dios se pone a prueba con los problemas. Si ustedes pasan la prueba, su confianza será más valiosa que el oro, pues el oro se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la confianza que ustedes tienen en Dios, porque una confianza que ha pasado por tantas pruebas merece ser alabada.

 

Cuando Dios permite el sufrimiento en  nuestra vida, aprendemos a disfrutar de las pequeñas cosa que Dios nos da cada día. Como el aire, la lluvia y el viento, así podremos ser felices cada día, sea con lo poco o con lo mucho que Dios nos da,  aprendemos a valorar los seres que tenemos a nuestro lado y la vida que Dios nos regala a cada instante, nos esforzaremos cada día por vivir una vida en santidad.

Si no aceptamos la disciplina de Dios, nos volveremos personas amargadas, resentidas con la vida y con Dios, nunca podremos llegar  a donde Dios nos quiere llevar,  no podremos ser hijos que agraden a Dios.

Heb 12:7  Si ahora ustedes están sufriendo, es porque Dios los ama y los corrige, como si fueran sus hijos. Porque no hay un padre que no corrija a su hijo.

Heb 12:8  Si Dios no los corrige, como lo hace con todos sus hijos, entonces ustedes no son en verdad sus hijos.

Heb 12:9  Cuando éramos niños, nuestros padres aquí en la tierra nos corregían, y nosotros los respetábamos. Con mayor razón debemos obedecer a Dios, que es nuestro Padre que está en el cielo, pues así tendremos vida eterna.

 

Heb 12:10  Cuando éramos niños, nuestros padres nos corregían porque pensaban que eso era lo mejor para nosotros. Pero Dios nos corrige para nuestro verdadero bien, para hacernos santos como él.

Heb 12:11  Desde luego que ningún castigo nos gusta en el momento de recibirlo, pues nos duele. Pero si aprendemos la lección que Dios nos quiere dar, viviremos en paz y haremos el bien.