lunes, 26 de mayo de 2014

CAVANDO MI PROPIA CISTERNA


 
 
 
CAVANDO MI PROPIA CISTERNA

Jeremias 2:13 Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua.

Dios quiere que confiemos plenamente, que dependamos física y emocionalmente de él.

Jesucristo es la fuente de agua viva.

En el señor encontramos paz, seguridad y felicidad,  él es nuestra fuente.

Una fuente es un manantial de agua, que fluye  constantemente dando vida.

Como cristianos debemos tomar de esa fuente si queremos tener vida en abundancia.

4:14 mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.

Una cisterna es un pozo que se cava  en la tierra o en la roca  para almacenar agua que brota de la tierra o de la lluvia.

Una fuente de agua constantemente está fluyendo agua mientras que la cisterna hay que abastecerla porque tiende a filtrarse y desaparecer.

El agua de la cisterna por lo general está siempre sucia y muchas veces nos puede satisfacer.

Mientras llueva y brote el agua de la tierra siempre la cisterna tendrá agua, y en el momento que esto cese el agua de la cisterna se secara.

El pueblo de Israel habían cometidos dos grande pecados habían rechazado  a Dios fuente de agua viva y habían cavado cisternas para saciar su sed y sus necesidades.

Todo lo que el mundo ofrece es una cisterna rota, el mundo ofrece placer y satisfacción temporal esto no es duradero, esto solo defrauda y trae mucha tristeza.

-El dinero, la fama y el poder son cisternas rotas.

-El éxito, la belleza es una cisterna rota

-Los deseos de la carne y placeres del mundo son cisternas rotas.

-Mi confianza en mi familia, mis amigos, mi trabajo son cisternas rotas.

Si Dios es nuestra fuente podemos depender del señor, porque hemos puesto  nuestra confianza y esperanza.

Si ponemos nuestra confianza en las cisternas rotas cuando vayamos  a beber sus aguas escasearan y no podremos satisfacer nuestras necesidades.

El que busca satisfacer sus propios deseos siempre anda cavando sus propias cisternas rotas, y buscan también abastecerlas llenándolas de toda clase de deseos pero allí el agua escasea no encontraran el gozo y la felicidad que tanto anhelan

 

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