DERRIBANDO FORTALEZAS
2Co 10:4 porque las (a) armas de nuestra lucha no son
carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,
2Co 10:5 destruyendo
argumentos, y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y
llevando cautivo todo (a) pensamiento
a la (b) obediencia a Cristo;
2Co 10:6 y estando prontos a
castigar toda (a) desobediencia
, cuando vuestra (b) obediencia
sea completa.
¿Que cosa es una fortaleza?
De acuerdo al
diccionario una fortaleza es un “recinto protegido con murallas o
construcciones de defensa para resguardarse de los enemigos.”
El Apóstol Pablo lista la palabra fortaleza para definir
la fortaleza espiritual donde satanás y sus legiones “se esconden y están
protegidos.” Estas fortalezas existen en las formas de pensar e ideologías que
gobiernan los individuos e iglesias, como también comunidades y naciones.
¿Cuáles son estas "fortalezas" o "fortificaciones" que nos enfrentamos? En el siguiente verso, Pablo interpreta la metáfora: "derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo." (2 Corintios 10:5).
Los "argumentos" son las filosofías, los razonamientos y los esquemas del mundo.
La "altivez" tiene que ver con todo orgullo, centrado en el hombre y seguro de sí mismo.
En ente mundo en el cual vivimos nos enfrentamos a pensamientos e ideologías carnales que quieren gobernar la mente, que van en contra de la palabra y que el mundo acepta como buenas, pero violan los principios morales.
Pablo nos habla de las armas
que debemos utilizar si queremos vencer al enemigo.
Estas
armas no son carnales son armas espirituales muy poderosas para derrotar a satanás.
Efe 6:12 Porque no luchamos contra gente como
nosotros, sino contra espíritus malvados que actúan en el cielo. Ellos imponen
su autoridad y su poder en el mundo actual.
Efe 6:13 Por lo tanto, ¡protéjanse con la armadura
completa! Así, cuando llegue el día malo, podrán resistir los ataques del
enemigo y se mantendrán firmes hasta el fin.
-HABLE
SIEMPRE CON PALABRA
-ORA
CON LA PALABRA
-
OBEDECE A LA PALABRA
1-HABLE
SIEMPRE CON LA PALABRA
Existe
mucha palabra en este mundo, pero la única palabra que tiene poder y que da vida
es la palabra de Dios, por esto el que habla la palabra de Dios crea vida y
vence la muerte que ha creado el enemigo.
Juan
6:63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada
aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Las
palabras que hablamos son las que dan vida o muerte, debemos
cuidar que lo que hablemos este
de acuerdo a la palabra, si es que queremos tener vida.
Proverbios
18:21 La muerte y la vida están en
poder de la lengua,
Y el que la ama comerá de sus frutos.
2-ORA CON LA PALABRA
Orar con la palabra es una de las mejores armas
para vencer al enemigo.
Confiese la palabra en el momento de orar,
exalte el nombre de Dios y confiese sus grandes obras.
Cuando oramos con la palabra podemos moldear
nuestra mente y corazón, para poder pedir conforme a la palabra y no conforme a
nuestras emociones.
Al orar con la palabra estamos demostrando la
clase de fe que hay en nuestro corazón.
Romanos
10:8 Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón.
Esta es la palabra de fe que predicamos:
Oraciones
de acuerdo a la palabra son oraciones poderosas para destruir fortalezas, que
traen libertad a nuestra vida.
Jeremias
23:29 ¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta
la piedra?
Efesios
6:18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando
en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
Nuestra
oración siempre debe ser en el Espíritu, con mucha perseverancia no debe ser
una oración de queja, de reclamos.
Debe
ser una oración de confianza en Dios sabiendo que el contestara nuestras
oraciones.
Cuando
ore haga declaraciones como estas.
Tengo
potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y
nada me dañara. Lucas 10. 19
3-OBEDECER LA PALABRA
La
mejor arma para vencer al enemigo y obtener la victoria en todas las áreas de
nuestra vida es la obediencia.
Si
queremos derrotar al enemigo tenemos primero que someternos a la palabra de
Dios.
Santiago
4:7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Cuando
guardamos la palabra de Dios siempre habrá felicidad.
Lucas
11:28 Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la
palabra de Dios, y la guardan.
Solo
podremos obedecer la palabra de Dios cuando nos sometemos al Espíritu Santo
para que el gobierne nuestra vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario