martes, 29 de abril de 2025

EL HOMBRE SU CAIDA Y REDENCION

 

EL HOMBRE SU CAIDA Y REDENCION



EL HOMBRE – SEMEJANTE A DIOS

En el último día de la creación, Dios dijo, “Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza;..” (Génesis1:26). Y así, de esta manera Él terminó Su trabajo con un “toque personal”. Dios formó al hombre del polvo y le dio vida de Su mismo aliento (Génesis 2:7). De acuerdo a esto, el hombre es el único, entre toda la creación de Dios, que tiene una parte material (cuerpo) y una inmaterial (alma / espíritu).

Tener la “imagen” o “semejanza” de Dios significa, en términos simples, que fuimos hechos para parecernos a Dios. Adán no se parecía a Dios en el sentido de que Dios tuviera carne y sangre. La Escritura dice que “Dios es espíritu” (
Juan 4:24) y por tanto Él existe sin un cuerpo material. Sin embargo, el cuerpo de Adán reflejó la vida de Dios, en cuanto a que fue creado con perfecta salud y no estaba sujeto a morir.

La imagen de Dios se refiere a la parte inmaterial del hombre. Esto coloca al hombre aparte del mundo animal, adecuándolo para el “dominio” que Dios le designó (Génesis 1:28), y capacitándolo para tener comunión con su Creador. Es una semejanza mental, moral y social.

Gén 1:28  Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.


Mentalmente, el hombre fue creado como un ser racional con voluntad propia – en otras palabras, el hombre puede razonar y elegir. Este es el reflejo de la inteligencia y la libertad de Dios. En cualquier momento alguien inventa una máquina, escribe un libro, pinta un paisaje, disfruta una sinfonía, calcula una suma, o nombra a una mascota, él o ella están proclamando el hecho de que fueron hechos a la imagen de Dios.

Socialmente, el hombre fue creado para tener compañerismo. Esto refleja la Trinidad de Dios y Su amor. En el Edén, la primera relación que tuvo el hombre fue con Dios (
Génesis 3:8 implica esta relación con Dios), y Dios hizo a la mujer, primeramente porque “no es bueno que el hombre esté solo...” (Génesis 2:18) Cada vez que alguien se casa, hace un amigo, abraza a un niño, o asiste a una iglesia, está demostrando el hecho de que fuimos hechos a la semejanza de Dios.

Parte del haber sido hechos a la imagen de Dios, es que Adán tuvo la capacidad de tomar decisiones libremente. Aunque le fue dada una naturaleza justa, Adán hizo una mala decisión al rebelarse en contra de su Creador. Al hacerlo, Adán dañó la imagen de Dios de su interior, y pasó esa semejanza dañada a todos sus descendientes, incluyéndonos a nosotros (
Romanos 5:12). Hoy, todavía llevamos esa semejanza de Dios (Santiago 3:9), pero también llevamos las cicatrices del pecado, y mostramos los efectos mental, moral, social y físicamente.

Stg 3:9  Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.


Las buenas noticias son que, cuando Dios redime a un individuo, Él comienza a restaurarlo a su semejanza original, haciendo de él “... el nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.” (Efesios 4:24; ver también Colosenses 3:10).

CAIDA DEL HOMBRE

I. EL ESTADO ORIGINAL DEL HOMBRE

A. "A nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza". Se refiere al hecho que el hombre fue creado con personalidad, inteligencia, moralidad, inmortalidad y espiritualidad. Gen. 1:26-27

B. Fue creado inocente; es decir, no sabía lo que era el pecado. Entonces antes de pecar fue santo, puro, recto, y justo en todo. (Ecl. 7:29). Solamente Adán y Eva vivieron en ese estado de santidad.

Ecl 7:29  He aquí, solamente esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas perversiones.

 

 II. LA CAÍDA. La historia literal de la caída lo encontramos en Gen. 3:1-6. No es un cuento sino la verdadera historia de lo que pasó.

A. EL TENTADOR FUE SATANÁS.

 (Gen. 3:1 con Apoc. 12:9). Entendemos que fue una verdadera serpiente, pero Satanás obró por medio de ella. Satanás ya había caído de su estado original por querer ser igual a Dios. Desde entonces ha luchado contra Dios y los planes de Dios. Es todavía el tentador.

B. EL PROCESO DE LA TENTACIÓN.

1. (Gen. 3:1) "¿Conque Dios os ha dicho...?" Con esta pregunta insinuó o sugirió que la prohibición (2:16-17) fue injusta y mostraba que Dios no les amaba tanto. Llamó la atención de la mujer a la única cosa prohibida, sin mencionar todos los privilegios provistos por el amor de Dios. Vale la pena recordar que las cosas prohibidas por Dios es una demostración del amor de Dios.

2. (Gen. 3:4-5) aquí tenemos las promesas de satanás a los hombres. Hoy en día sus promesas son iguales. Hay que recordar que es el padre de mentiras.

Juan 8:44  Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.

 

(a "No moriréis". (vs. 4) Dios dice al contrario. Gen. 2:17; Eze. 18:20; ¡Satanás acusó a Dios de mentir! ¡Dios, sí, castiga el pecado!

Rom 6:23  Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

 (b) (vs. 5) Ahora Satanás presenta las razones, según él, por las cuales Dios les prohibió comer del árbol. Sugiere que Dios está reteniendo bendiciones que ellos necesitan. "Serán abiertos vuestros ojos". Eva creyó que iba a tener mucha sabiduría. En parte se cumplió. (vs. 7). Pero lo que aprendieron les causó vergüenza.

(c) (vs. 5) "Y seréis como Dios". Les tentó con el mismo pensamiento malvado que causó su propia caída. Isa. 14:12-14.

 (d) vs. 5) "... sabiendo el bien y el mal". Esta parte de la promesa se cumplió. Ya sabían el bien. Comiendo, supieron el mal. Sabiendo el mal por participación resultó en la perdición. Satanás no mencionó eso.

C. LA DESOBEDIENCIA DE ADÁN Y EVA.

1. Eva. Génesis 3:6; I Juan. 2:16.

(a) "y vio... bueno para comer"; "Los deseos de la carne".

(b) "agradable a los ojos"; "Los deseos de los ojos".

(c) "Codiciable para alcanzar sabiduría"; "La vanagloria de la vida".

2. Adán. Inmediatamente la mujer se convirtió en tentadora - "y dio también a su marido. Adán deliberadamente comió. La mujer fue engañada.

1Ti 2:14  y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión.

 

III. LOS RESULTADOS DE LA CAÍDA.

A. Fueron varios los resultados para Adán y Eva inmediatamente.

1. Perdieron su inocencia. (Génesis 3:7).

2. Tuvieron temor de Dios. (3:8). Antes fue un gozo estar en Su presencia.

3. Fueron expulsados del huerto. (3:24).

B. Los Resultados para todos los humanos.

O  Para las mujeres, dolores en dar a luz y sujetas al marido. Gen. 3:16

O  Para el hombre, trabajos duros para sostener la familia por causa de la tierra maldita. Gen. 3:17-19.

El pecado entró en la raza humana. Desde que Adán es el padre de todos, todos estaban en Adán cuando él pecó. Cayendo él, cayeron todos. Recibimos la naturaleza pecaminosa de Adán.

Romanos. 5:12. Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

 

O  El resultado del pecado es la muerte.

(a) Gen. 2:17 Adán murió espiritualmente al momento de pecar Ef. 2:5. Fue destituido (separado) de la gloria de Dios. Rom. 3:23

(b) La muerte espiritual significa la muerte eterna para los inconversos. Muerte eterna quiere decir eterna separación de Dios. Apoc. 21:8

                                                                                          .

(b)  Adán fue y todos los hombres son, sentenciados a morir físicamente.; Heb. 9:27.

Gén 3:19  Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

 

                                        CRISTO NOS REDIMIO

                                           

Él te ve a ti en Adán o en Cristo, me ve a mí en Adán o en Cristo.

¿QUÉ QUIERE DECIR "estar en Adán"? Estar en Adán es participar en todo lo que Adán era y hacía. Por naturaleza todos estábamos en Adán, separados de Dios y esclavos del pecado y de Satanás. ¡Qué terrible!

PERO AQUÍ HAY NOTICIAS MARAVILLOSAS. Cuando nacimos de nuevo, Dios nos puso en Cristo. No podíamos hacer esto nosotros mismos, pero Dios lo hizo por nosotros. Ahora estamos en Cristo.

Efe 1:7  en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia,

¿CÓMO LLEGAMOS A ESTAR EN CRISTO? ¡Dios nos puso allí! La Biblia dice:

Mas por él (de Dios) estáis vosotros en Cristo Jesús . . . (1 Corintios 1:30).

La frase más preciosa en la Biblia es esta pequeña frase: "En Cristo". ¡Esta frase o su equivalente aparecen más de 130 veces en el Nuevo Testamento!

Dios . . . nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo:

Según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo .  (Efesios 1:3-4).

Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas (Efesios 2:10).

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (2 Corintios 5:17).

y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo (1 Juan 5:20).

en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados (Colosenses 1:14).

Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús
(Romanos 8:1).

. . . a los santificados en Cristo Jesús . . . (1 Corintios 1:2).

¿Te fijaste en las palabras, "en Cristo", "en Él", y "en el cual"? Conforme leas el Nuevo Testamento, encontrarás estas palabras muchísimas veces.

¿QUÉ QUIERE DECIR ESTAR "EN CRISTO"? Estar en Cristo es participar de todo lo que Cristo es y de todo lo que Él hizo. La Biblia dice que Dios nos bendijo con toda bendición espiritual. en Cristo. Vamos a considerar algunas de estas bendiciones que son nuestras porque estamos en Cristo.

SOMOS PERDONADOS

Porque estamos en Cristo, Dios nos ha perdonado todos los pecados

en Él cual tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados Colosenses 1:14.

 SOMOS JUSTIFICADOS

¿Qué quiere decir ser justificado? Quiere decir ser declarado justo. ¿Cómo somos justificados ante Dios? Somos justificados en Cristo. El Señor Jesús era perfectamente justo, y ahora Dios nos ve justos en Él. Él llevó nuestros pecados para que nosotros tuviéramos Su justicia. La Biblia dice:

Al que no conoció pecado Cristo), por nosotros (Dios) lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él. 2 Corintios 5:21                                                                                   .

SOMOS HECHOS CERCANOS A DIOS

Como pecadores estábamos separados de Dios y teníamos temor de acercarnos a Su presencia. Pero ahora, en Cristo Jesús, podemos aproximarnos confiadamente a la presencia de Dios porque la sangre de Jesucristo nos ha limpiado de todo pecado.

Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo Efesios 2:13.

SOMOS ACEPTADOS POR DIOS

Antes de ser salvos, éramos enemigos de Dios. Ahora somos aceptados por Él como Sus propios hijos amados. ¿Por qué somos aceptados por Dios? ¡Porque estamos en Cristo!

Para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado en Cristo) (Efesios 1:6).

SOMOS SANTOS

Dios tiene un nombre nuevo para los creyentes. El llama a los creyentes "santos en Cristo Jesús". La palabra "santo" quiere decir uno que es perfecto y libre de toda culpa. A los ojos de Dios, cada creyente es un santo en Cristo. En nosotros mismos no somos santos, pero Dios nos ve en Cristo.

Cuando comparecemos ante Dios, comparecemos en la santidad de Cristo. Somos "santos en Cristo".

SOMOS SELLADOS

Somos hijos de Dios y nuestro destino es el Cielo. Dios nos ha puesto en Cristo y nos ha sellado con el Espíritu Santo.

y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa (Efesios 1:13). En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,

 SOMOS COMPLETOS

Todo lo que necesitamos para vivir la vida cristiana es nuestro en Cristo. Somos completos en Él. La Biblia dice:

Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él . (Colosenses 2:9-10).

Hemos considerado solamente unos pocos de los versículos que nos dicen lo que significa estar en Cristo. Como hijos de Dios, ya no estamos en Adán. Ahora estamos en Cristo.

¿QUERRÁ DECIR ESO QUE NUNCA MÁS VOLVEREMOS A PECAR?

No, no quiere decir eso. En la epístola que el apóstol Pablo escribió a los creyentes en Corinto, encontramos algunas cosas que parecen difíciles de entender. Por un lado, Pablo llama a estos creyentes "santos" y dice que son "santificados" (hechos santos) en Cristo Jesús. Por otra parte, en la misma carta, Pablo habla de algunos de los pecados terribles en sus vidas. Algunos de ellos eran orgullosos; otros se peleaban entre ellos mismos y otros más eran culpables de inmoralidad.

¿Cuál es la explicación de esto? ¿Cómo podía decir Pablo que eran "santos en Cristo" mientras que a la vez no estaban viviendo como los cristianos debieran vivir? Para responder a estas preguntas, debemos comprender la diferencia entre nuestra posición y nuestra condición.

¿CUÁL ES NUESTRA POSICIÓN?

Nuestra posición es la manera como Dios nos ve en Cristo. Incluye todo lo que Dios ha hecho por nosotros en Cristo. Dios nos ha dado una posición perfecta en Cristo.

¿Es nuestra posición siempre perfecta? Sí, lo es. ¿Por qué? Porque depende de lo que Dios ha hecho por nosotros en Cristo. Estamos en Cristo, y Dios nos ve perfectos en Él.

Porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados (los que están en Cristo) Hebreos 10:14.

 ¿CUÁL ES NUESTRA CONDICIÓN?

Nuestra condición es la manera como vivimos en la tierra. La Biblia la llama nuestro "andar".

¿Es perfecta nuestra condición alguna vez? No, no lo es. ¿Por qué? Porque depende de lo que somos en nosotros mismos. Somos pecaminosos. La Biblia dice:

Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros (1 Juan 1:8).

Nos ayudará en nuestra vida cristiana recordar que nuestra posición es la manera como Dios nos ve en Cristo mientras que nuestra condición es la manera como vivimos en la tierra. A la vista de Dios en Cristo siempre somos perfectos; en nosotros mismos, somos pecaminosos.

¿Querrá decir eso que podemos estar satisfechos con nuestros pecados? ¡No, no quiere decir eso! Dios quiere que nuestra vida cotidiana llegue a la altura de nuestra posición en Cristo. Somos "santos en Cristo"; Dios quiere que seamos santos también en nuestra vida diaria.

Sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir (1 Pedro 1:15).

¿CÓMO PODEMOS SER SANTOS?

En Su Palabra, Dios nos ha dicho cómo debemos "andar" o vivir en esta vida. Debemos andar por fe. Esto quiere decir que debemos depender de lo que somos en Cristo.

Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él (Colosenses 2:6).

He aquí un gran secreto de la vida cristiana:

Cuando comprendemos que somos "santos en Cristo Jesús" nos convertimos en santos en nuestra vida diaria. Cuando vemos que somos "santos en Cristo Jesús" empezamos a vivir como los santos deben vivir. Cuando vemos que verdaderamente somos "hijos de Dios" empezamos a vivir como deben vivir los hijos de Dios.

Cuando dependemos de lo que somos en Cristo, el Espíritu Santo lo hace real en nuestra vida.

 

 

 

 

 

 

 

martes, 22 de abril de 2025

EL PECADO ES COMO LA LEPRA

 

EL PECADO ES COMO LA LEPRA

                                                            


Rom 7:20  Pero si hago lo que no quiero hacer, en realidad no soy yo quien lo hace, sino el pecado que está dentro de mí.

 

Rom 7:21  Me doy cuenta entonces de que, aunque quiero hacer lo bueno, sólo puedo hacer lo malo.

Rom 7:22  En lo más profundo de mi corazón amo la ley de Dios.

Rom 7:23  (23-25) Pero también me sucede otra cosa: hay algo dentro de mí, que lucha contra lo que creo que es bueno. Trato de obedecer la ley de Dios, pero me siento como en una cárcel, donde lo único que puedo hacer es pecar. Sinceramente, deseo obedecer la ley de Dios, pero no puedo dejar de pecar porque mi cuerpo es débil para obedecerla. ¡Pobre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo, que me hace pecar y me separa de Dios? ¡Le doy gracias a Dios, porque sé que Jesucristo me ha librado!

 

La lepra es una enfermedad infecciosa, que si no recibe tratamiento adecuado puede contaminar a otras personas y traer muerte.

La lepra no es fácil de detectar porque tiene un largo periodo de incubación, puede durar hasta 10 años hasta que aparecen los primeros síntomas, que si no se tratan a tiempo se reflejaran en las ulceras que se forman en la piel.

La lepra ataca a la piel y a los nervios,  provoca al enfermo una anestesia que le impide sentir dolor. Aparecen progresivamente parálisis musculares que pueden llevar a mutilaciones graves.

En el pasado la lepra era considerada más que una enfermedad, era una contaminación para la humanidad.

Muchos de esos leprosos eran aislados de sus familias y de la sociedad,  pues se creía que la lepra era contagiosa.

Levíticos 13:44 leproso es, es inmundo, y el sacerdote lo declarará luego inmundo; en su cabeza tiene la llaga.
13:45 Y el leproso en quien hubiere llaga llevará vestidos rasgados y su cabeza descubierta, y embozado pregonará: ¡Inmundo! ¡Inmundo!
13:46 Todo el tiempo que la llaga estuviere en él, será inmundo; estará impuro, y habitará solo; fuera del campamento será su morada.

LA LEPRA UNA ENFERMEDAD QUE MATA ASÍ COMO EL PECADO

En el pueblo de Israel si una persona tenía Lepra se llevaba ante el sacerdote para ser examinado.

Levíticos 13:1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón, diciendo:
13:2 Cuando el hombre tuviere en la piel de su cuerpo hinchazón, o erupción, o mancha blanca, y hubiere en la piel de su cuerpo como llaga de lepra, será traído a Aarón el sacerdote o a uno de sus hijos los sacerdotes.
13:3 Y el sacerdote mirará la llaga en la piel del cuerpo; si el pelo en la llaga se ha vuelto blanco, y pareciere la llaga más profunda que la piel de la carne, llaga de lepra es; y el sacerdote le reconocerá, y le declarará inmundo.

El pecado nos hace inmundos o sucios ante los ojos de Dios.

CARACTERÍSTICAS DEL PECADO Y LA LEPRA

Es más profundo que la piel

La lepra no solo era una erupción superficial, era mucho más profunda que la piel, así como lo es el pecado. El problema no está en la superficie,  en lo que se ve a simple vista. Está en lo más profundo, en la naturaleza pecaminosa. Nuestra naturaleza pecaminosa es la fuente de muchos problemas que pasamos. Al pecador no se le puede sanar con algo superficial, necesita algo más profundo que renueve su corazón y esto es Jesucristo

Levíticos 13:2 Cuando el hombre tuviere en la piel de su cuerpo hinchazón, o erupción, o mancha blanca, y hubiere en la piel de su cuerpo como llaga de lepra, será traído a Aarón el sacerdote o a uno de sus hijos los sacerdotes.

Se esparce en todo el cuerpo

El pecado contamina todo el cuerpo, así como la lepra se esparcía  y contaminaba todo el cuerpo.

El pecado siempre comienza con un pensamiento, luego con un deseo, hasta llegar a un acto con desenlaces terribles que solo destruyen.

Levíticos 13:7 Pero si se extendiere la erupción en la piel después que él se mostró al sacerdote para ser limpio, deberá mostrarse otra vez al sacerdote.
13:8 Y si reconociéndolo el sacerdote ve que la erupción se ha extendido en la piel, lo declarará inmundo: es lepra.

Contamina

En el pueblo de Israel al leproso no se le permitía participar en servicios religiosos, se le obligaba a marcarse como leproso y a gritar; inmundo, inmundo,  para advertir a los que le rodeaban. El que tocara un leproso quedaba contaminado. Así es el pecado ensucia la mente, el corazón, el cuerpo y todo lo que toca. Un pecador puede contaminar su hogar, su trabajo.

Levitivico 13:44 leproso es, es inmundo, y el sacerdote lo declarará luego inmundo; en su cabeza tiene la llaga.
13:45 Y el leproso en quien hubiere llaga llevará vestidos rasgados y su cabeza descubierta, y embozado pregonará: ¡Inmundo! ¡Inmundo!


Aísla

El leproso tenía que vivir fuera del campamento, con los demás leprosos, o solo, era una vida triste. El pecado nos aísla nos separa de nuestra familia,  amigos, iglesia y finalmente de Dios

13:46 Todo el tiempo que la llaga estuviere en él, será inmundo; estará impuro, y habitará solo; fuera del campamento será su morada.

Nos lleva a pasar por el fuego

Todo lo que se hallaba contaminado con la lepra tenía que pasar por el fuego.

Al pecador que no se arrepiente solo le espera el fuego, la tristeza y el dolor.

No podemos ocultar la lepra del pecado, siempre se manifestara y será vista.

Mar 9:43  (43-44) »Si lo que haces con tu mano te hace desobedecer a Dios, mejor córtatela. Es mejor quedarse para siempre sin una mano, que tener las dos manos y ser echado al infierno, donde el fuego nunca se apaga.

 

Mar 9:45  (45-46) »Si lo que haces con tu pie te hace desobedecer a Dios, mejor córtatelo. Es mejor quedarse para siempre sin un pie, que tener los dos pies y ser echado al infierno.

 

Mar 9:47  »Si lo que ves con tu ojo te hace desobedecer a Dios, mejor sácatelo. Es mejor que entres al reino de Dios con un solo ojo, que tener los dos ojos y ser echado al infierno,

Mar 9:48  donde hay gusanos que nunca mueren, y donde el fuego nunca se apaga.


COMO SER LIMPIADOS DE LA LEPRA DEL PECADO

El leproso acude al sacerdote

Al leproso se le impedía entrar en el campamento, el sacerdote tenía que ir donde estaba el leproso, así como vino y murió por nosotros para limpiarnos, él nos buscó para darnos salvación.

Levíticos 14:2 Esta será la ley para el leproso cuando se limpiare: Será traído al sacerdote,
14:3 y éste saldrá fuera del campamento y lo examinará; y si ve que está sana la plaga de la lepra del leproso,

Hebreos 13:12 Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta.
13:13 Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio;

 

El sacerdote ofrece sacrificios

Lev 14:4  mandará traer para el que se purifica dos pajarillos vivos, que sean puros, y madera de cedro, tela roja e hisopo.[b]

Lev 14:5  Ordenará que se mate uno de los pajarillos sobre una olla de barro que contenga agua de manantial,

Lev 14:6  y tomará el pajarillo vivo, la madera de cedro, la tela roja y el hisopo, y mojará estas cosas y el pajarillo vivo con la sangre del pajarillo muerto sobre el agua de manantial.

Lev 14:7  Luego rociará siete veces con la sangre al que va a ser purificado de la lepra, y lo declarará puro. Al pajarillo vivo lo dejará en libertad.

Lev 14:8  “El que se purifica debe lavar su ropa, y lavarse a sí mismo y afeitarse del todo, para quedar purificado. Después podrá entrar en el campamento, aunque durante siete días se quedará viviendo al aire libre.


Esta ceremonia es la representación del sacrificio que hizo Cristo en la cruz para limpiarnos

El dejo el cielo, para tomar un cuerpo de barro morir por nosotros y con su sangre limpiarnos de todo pecado para que pudiéramos vivir en libertad.

El leproso se lava y espera

Levíticos 14:8 Y el que se purifica lavará sus vestidos, y raerá todo su pelo, y se lavará con agua, y será limpio; y después entrará en el campamento, y morará fuera de su tienda siete días.
14:9 Y el séptimo día raerá todo el pelo de su cabeza, su barba y las cejas de sus ojos y todo su pelo, y lavará sus vestidos, y lavará su cuerpo en agua, y será limpio.

Después que el sacerdote ya lo había declarado limpio el leproso tenia que lavarse

Después que Cristo nos ha limpiado con su sangre debemos preocuparnos por mantener nuestra vida libre de toda contaminación de pecado.

El leproso debía esperar ocho días, porque ocho es el  símbolo de la resurrección y un nuevo comienzo.


El leproso ofrece sacrificio

14:10 El día octavo tomará dos corderos sin defecto, y una cordera de un año sin tacha, y tres décimas de efa de flor de harina para ofrenda amasada con aceite, y un log de aceite.
14:11 Y el sacerdote que le purifica presentará delante de Jehová al que se ha de limpiar, con aquellas cosas, a la puerta del tabernáculo de reunión;
14:12 y tomará el sacerdote un cordero y lo ofrecerá por la culpa, con el log de aceite, y lo mecerá como ofrenda mecida delante de Jehová.
14:13 Y degollará el cordero en el lugar donde se degüella el sacrificio por el pecado y el holocausto, en el lugar del santuario; porque como la víctima por el pecado, así también la víctima por la culpa es del sacerdote; es cosa muy sagrada.

De nuevo en el campamento ofrece una ofrenda una por la transgresión, por el pecado y un holocausto.

La ofrenda por el pecado resolvía su contaminación.

El holocausto representaba su renovada dedicación a Dios

La ofrenda por la transgresión se ofrecía  debido a que estuvo inmundo y no pudo servir a Dios como debía entonces tenía una deuda.

El sacerdote aplicaba la sangre y el aceite

14:14 Y el sacerdote tomará de la sangre de la víctima por la culpa, y la pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho.
14:15 Asimismo el sacerdote tomará del log de aceite, y lo echará sobre la palma de su mano izquierda,
14:16 y mojará su dedo derecho en el aceite que tiene en su mano izquierda, y esparcirá del aceite con su dedo siete veces delante de Jehová.
14:17 Y de lo que quedare del aceite que tiene en su mano, pondrá el sacerdote sobre el lóbulo de la oreja derecha del que se purifica, sobre el pulgar de su mano derecha y sobre el pulgar de su pie derecho, encima de la sangre del sacrificio por la culpa.
14:18 Y lo que quedare del aceite que tiene en su mano, lo pondrá sobre la cabeza del que se purifica; y hará el sacerdote expiación por él delante de Jehová.
14:19 Ofrecerá luego el sacerdote el sacrificio por el pecado, y hará expiación por el que se ha de purificar de su inmundicia; y después degollará el holocausto,
14:20 y hará subir el sacerdote el holocausto y la ofrenda sobre el altar. Así hará el sacerdote expiación por él, y será limpio.

El sacerdote tomaba la sangre y la aplicaba en la oreja, los pulgares de la mano y del pie derecho simbolizando que su cuerpo había sido comprado y que ahora le pertenecía a Dios.

El sacerdote ponía aceite sobre la sangre símbolo del poder del espíritu de Dios. La sangre no podía ponerse en el aceite; el aceite  debía ponerse en la sangre, porque donde se ha aplicado la sangre el Espíritu puede obrar, el resto del aceite se derramaba sobre la cabeza del hombre, así era ungido para una nueva vida.

Hoy en día esto se logra mediante la fe en el señor Jesucristo. El salió fuera del campamento para hallarnos, murió y resucito para salvarnos. Cuando confiamos en Jesús el aplica la sangre y el aceite símbolo de Espíritu Santo en nuestras vidas y nos restaura a una vida en comunión con Dios.

Heb 13:10  Nosotros tenemos un altar[k] distinto, del cual no tienen derecho a comer los sacerdotes del antiguo santuario.

Heb 13:11  El sumo sacerdote lleva la sangre de los animales al santuario, como ofrenda para quitar el pecado, pero los cuerpos de esos animales se queman fuera del campamento.

Heb 13:12  Así también, Jesús sufrió la muerte fuera de la ciudad, para consagrar al pueblo por medio de su propia sangre.[l]

Heb 13:13  Vayamos, pues, con Jesús, fuera del campamento,[m] y suframos la misma deshonra que él sufrió.[n]

 

miércoles, 2 de abril de 2025

EL HIJO (CRISTO- SU DEIDAD)

                                                EL HIJO (CRISTO- SU DEIDAD)

                                                            


El SEÑOR JESUCRISTO


El Señor Jesucristo es el tema central de la santa Escritura. Debemos considerar Su Deidad, Su Encarnación, Su obra y Sus oficios.


SU DEIDAD


En el Antiguo Testamento Dios dijo a Moisés, “YO SOY EL QUE SOY.” Este nombre fue usado frecuentemente por Jesús para demostrar Su Deidad. Cuando Él frecuentemente usaba el nombre “YO SOY,” estaba diciendo, “Yo soy Dios.”


A. “YO SOY el pan que descendió del cielo.” Juan 6:41.

B. “YO SOY la luz del mundo.” Juan 8:12.

C. “YO SOY la puerta.” Juan 10:7.

D. “YO SOY el buen pastor.” Juan 10:11.

E. “YO SOY la resurrección y la vida.” Juan 11:25.

F. “YO SOY el camino, la verdad y la vida.” Juan 14:6.

G. “YO SOY la vid verdadera.” Juan 15:1.

La deidad de Cristo significa que Cristo es Dios. La Escritura claramente enseña este importante hecho de las siguientes maneras:


A. Los atributos de Dios son usados en la Biblia hablando de Cristo.


(1) Su pre-existencia. Cristo no tiene principio. Juan 1:1-3; 17:5.

(2) Su omnipresencia. Él está con Sus siervos en todo lugar. Mateo 28:20.

(3) Su omnipotencia. Él tiene ilimitado poder. Apocalipsis 1:18.

(4) Su omnisciencia. Él tiene ilimitado conocimiento. Juan 21:17.

(5) Su inmutabilidad. “Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos." Hebreos 13:8.


B. Las obras de Dios fueron llevadas a cabo por Cristo.


(1) Él creó todas las cosas. Juan 1:3.

(2) Él sostiene el universo. Colosenses 1:16-17.

(3) Él se resucitó a sí mismo de entre los muertos. Juan 2:19.


Juan 1:3  Todas las cosas por éste fueron hechas; y sin él nada de lo que es, fué hecho.

C. Los títulos de Dios son dados a Cristo.


(1) Dios el Padre reconoce al Hijo como Dios. Hebreos 1:8.

(2) Los hombres le llamaron Dios, y Él no rehusó la adoración de ellos. Juan 20:28.

(3) Los demonios le reconocieron como Dios. Marcos 1:24.

(4) Él declaró de sí mismo ser Dios. Juan 10:30.

Juan 10:30  Yo y mi padre somos uno.


SU ENCARNACIÓN

Por la encarnación de Cristo comprendemos su venida a este mundo como hombre.


A. La venida de Cristo fue preanunciada en el Antiguo Testamento. Isaías 7:14.

Isaías 7:14 Dios mismo les va a dar una señal:

La joven está embarazada,

y pronto tendrá un hijo,

al que pondrá por nombre Emanuel,

es decir, “Dios con nosotros”.


Los registros históricos del nacimiento de nuestro Señor. Su nacimiento fue diferente a todos los demás

nacimientos:


(1) fue concebido por el Espíritu Santo. Lucas 1: 35.

Lucas 1:35 Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.


(2) nació de una virgen. Mateo 1:23.

(3) fue verdaderamente hombre, poseyendo cuerpo Hebreos 10:5, alma (Mateo 26:38) y espíritu (Lucas 23:46).

Mat 26:38  Entonces Jesús les dice: Mi alma está muy triste hasta la muerte: quedaos aquí, y velad conmigo.

B. Cristo vino en forma humana para:


(1) Revelar al Padre. Juan 14:9.

(2) Quitar el pecado por el sacrificio de sí mismo. Hebreos 9:26.

(3) Destruir las obras del diablo. I Juan 3:8.

I Juan 3:8. El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.


Una de las verdades fundamentales de la fe cristiana es que Jesucristo es verdaderamente Dios y que vino a este mundo como un hombre por el milagro del nacimiento virginal. Por causa de su nacimiento no recibió la naturaleza pecaminosa o adámica Romanos 5:12. Como hombre, Él era absolutamente sin pecado. Su vida sin pecado y Su resurrección corporal de entre los muertos confirman estas verdades.

Rom 5:12  Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.


SU OBRA


Bajo este encabezamiento, discutiremos la muerte del Señor, su resurrección y su ascensión. La cruz es la verdad fundamental de la revelada Palabra de Dios. Por la cruz no queremos referirnos al madero, sino al Sacrificio sobre el madero. Desde el Tabernáculo en el desierto, a través del Antiguo Testamento, la Palabra de Dios está llena con símbolos de Cristo y Su crucifixión.

·   Él es el Cordero Pascual de Éxodo 12

·   La serpiente de bronce de Números 21:6  y Juan 3:14-15


·   Él es el Pastor del Salmo 23 y el Pastor herido de Zacarías 13:6-7.

·   Él es el Salvador sufriente de Isaías 53:3 y el Rey de Gloria del Salmo 24:9-10.

       Salmos 24:9,10 «¡Abran los portones de Jerusalén!
      ¡Dejen abiertas sus antiguas entradas!
      ¡Está pasando el Rey poderoso!»
  «¿Y quién es este Rey poderoso?»
   «¡Es el Dios de Israel,
     el Rey poderoso!
   ¡Él es el Dios del universo!»

A. Su muerte.

(1) Nadie es salvado por la vida de Cristo sino por la muerte de Cristo. Juan 3:14-18.

(2) Fue parte del eterno propósito de Dios. Hebreos 10:7.

(3) Fue necesaria para cumplir las profecías del Antiguo Testamento. Isaías 53:5.  

(4) Fue necesaria para proveer salvación al hombre. Efesios 1:7.

(5) La muerte de Cristo fue por otros. Él murió como un sustituto.


     Isaías 53:5  Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

1Corintios 15:3  Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados , conforme a las Escrituras;


La muerte de Cristo fue suficiente, porque, en primer lugar cumplió completamente las demandas de Dios porque Cristo soportó y agotó el juicio divino contra el pecado; y en segundo lugar suple completamente toda necesidad humana porque fue la muerte de una persona infinita y por lo tanto su valor es infinito.

 B. Su Resurrección

     La resurrección corporal de Jesucristo fue necesaria para cumplir la profecía, para completar la obra de la cruz Romanos 4:25, y para elevar a Cristo a su presente obra en el cielo.

Rom 4:25  el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.


 El cuerpo resucitado de Jesucristo era real. No era un espíritu Lucas 24:39. Fue el mismo cuerpo que había sido crucificado, porque tenía las marcas de los clavos y la herida en su costado Juan 20:27.

Juan 20:27 Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos;  acerca  tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente. 
     Pero ciertamente también era un cuerpo cambiado, con poder para          sobrepasar las limitaciones físicas.

·  Después de su resurrección, Cristo apareció a algunos de sus seguidores al menos 10 veces. Mas de 500 testigos a la vez lo vieron después que resucitó y testificaron que Jesús de hecho había resucitado de entre los muertos I Corintios 15:6-8.

1Co 15:6  Después apareció a más de 500 hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen.

1Co 15:7  Después apareció a Jacobo ; después a todos  los apóstoles;

La resurrección de Cristo es una importante verdad. Si no hubiera habido resurrección, no habría fe cristiana. Este sólo evento separa el cristianismo de todas las demás religiones, ya que todas apuntan a la tumba de su líder y “salvador.” Nosotros no tenemos un Dios muerto.

Nosotros tenemos un Salvador Viviente, que triunfó sobre la muerte y la tumba y está vivo para siempre. En las cortes del mundo, el testimonio de testigos presenciales convalida la evidencia de cada caso. Las opiniones personales son de poco valor. Con alrededor de 500 testigos oculares habiendo personalmente visto al Cristo resucitado de los muertos, no queda duda de la validez de los eventos.


C. Su ascenso.

     Al final de su ministerio en la tierra, Cristo fue elevado al cielo Lucas 24:50; Hechos 1:9-11. Su cuerpo fue visible para aquellos que fueron testigos oculares mientras Él ascendió al cielo para cumplir su promesa de Juan 14:2-3. Él dijo: “Voy a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” Juan 14:2-3.  

Lucas 24.50 Y aconteció que bendiciéndolos, se separó de ellos, y fue llevado arriba al cielo.


·   Él ascendió para poder entrar en Su gloria Juan 17:5, y continuar su ministerio por Su gente. El primer capítulo de Apocalipsis es el testimonio de Juan sobre el Cristo entronado.

 Juan 17:5 Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.


SUS OFICIOS

 Cristo es presentado en las Escrituras como un Profeta, un Sacerdote y un Rey.


    A. Como Profeta, Él habla a los hombres lo que Dios debe decirles, y Él revela a Dios a los hombres. Juan 1:18.

Jua 1:18  A  Dios nadie le vio jamás; el unigénito hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.


B. Como Sacerdote, Él representa a los creyentes delante de Dios. Hebreos 4:14-16.

C. Como Rey, El reina hoy en los corazones de aquellos que se someten a Él. En el tiempo venidero, El reinará sobre la tierra por mil años Apocalipsis 20:2-3.


C. Como Rey, El reina hoy en los corazones de aquellos que se someten a Él. En el tiempo venidero, El reinará sobre la tierra por mil años Apocalipsis 20:2-3.

 El Salmo 72 describe Su reino sobre la tierra. Desde entonces, y por la eternidad el Señor continuará siendo nuestro Rey de Reyes y Señor de Señores.