viernes, 18 de febrero de 2022

¿COMO DEBE SER UN LIDER CRISTIANO?

 

¿COMO  DEBE SER  UN  LIDER CRISTIANO?



Luc 22:26  Pero entre ustedes será diferente. El más importante de ustedes deberá tomar el puesto más bajo, y el líder debe ser como un sirviente.

 

Jesús dice que el mas importante debe  ser  como  el miembro más  pequeño,  el  que tal vez  no  tiene   un  puesto  de  importancia y que solo  es  un  sirviente

Jesús  ordena  a los  líderes  que sean  como  el  más  joven.  Esto  implica  que  hay   que  armarse  de  humildad y  ponerse  en  la  posición  más  baja. 

Nadie  debe  pensar  que  es  el  más  grande  o  que tiene  las  cualidades  para  ocupar  ciertos  cargos, solo  somos  hermanos  en  Cristo  y  siervos  del  señor. Cuando  empezamos   a preocuparnos  por  el  puesto  más  alto,  o  tener  el  reconocimiento  que   nos  merecemos,  hemos  perdido  el  enfoque  de  lo  que  es  un  liderazgo  cristiano;  corremos  el  riesgo  de caer.

Mat 23:8  »Pero ustedes no esperen que la gente los llame maestros, porque ustedes son como hermanos, y tienen solamente un maestro.

Mat 23:9  No le digan padre a nadie, porque el único padre que ustedes tienen es Dios, que está en el cielo.

Mat 23:10  Tampoco esperen que la gente los trate como líderes, porque yo, el Mesías, soy su único líder.

Mat 23:11  El más importante de ustedes deberá ser el sirviente de todos.

Mat 23:12  Porque los que se creen más importantes que los demás serán tratados como los menos importantes. Y los que se comportan como los menos importantes, serán tratados como los más importantes.»

Un  verdadero  líder  no   ambiciona  posiciones,  solo  se  dedica  a servir, Cuando  se  cae  en ese error  se corre  un  grave  peligro, porque  nos  estamos  colocando  en  puestos  o  en  títulos  que   no  nos  corresponden.

EL  LIDER  CRISTIANO  SE  CARACTERIZA  POR EL SERVICIO

Jesús  dice  y el  que  dirige  debería  ser  como  el  que  sirve Luc. 22:26.

Pablo, por ejemplo, se llama a sí mismo “siervo de Jesucristo” en Romanos 1:1 y “siervo de Dios” en Tito 1:1. Santiago hace lo mismo en la apertura de su carta a los judíos, presentándose como siervo de Dios y del Señor Jesucristo. Lo mismo hacen Pedro y Judas en las primeras líneas de sus epístolas.

No sólo los apóstoles son llamados a ser siervos de Dios y de Jesucristo, todos los cristianos somos llamados a ser siervos de Dios. En Romanos 6:22, el apóstol Pablo nos dice que los cristianos hemos sido liberados del pecado y hechos siervos de Dios.

El apóstol Pedro nos insta, en su primera epístola a que vivamos como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios (1 P. 2:16).

LA PALABRA SIERVO significa esclavo. Describe a alguien que está sujeto a la voluntad de su Señor, y totalmente a la disposición de él.

Al usar este término para describirse, los apóstoles están expresando su absoluta devoción y sujeción a Cristo, están expresando su actitud de absoluta  obediencia hacia Cristo, algo a lo que no sólo los apóstoles fueron llamados, reitero,  sino todos los que somos de Cristo

 El  líder  debe  ser  como  aquel  a  quien  sirve.     no eres  el  jefe  o  el  dictador  sino  que eres  el  que  sirve  a Dios y a  los  demás.

El  líder  no debe  dejarse  llevar  por  su  ego y  buscar  que  le  sirvan,  que  hagan  las  tareas  que  le  corresponden  a  usted. O  que  sea  otro  el  que  trabaje  porque  nos  creemos   muy  importantes como  para  ocuparnos  de cosas insignificantes. El  líder que  solo  busca  que  lo  complazcan  no  está  calificado  para  ser  un  líder  cristiano.

Servir significa  dar,  no  obtener.  Usted  lidera  para dar  a  otros,  para  bendecirles, para  edificar  sus  vidas y  fortalecerles,  no  para  disfrutar  del  poder, la  posición y  el  prestigio que  viene  con  el  liderazgo.

El  líder  debe  preocuparse  por  usar  esa  influencia  y  poder, para  levantar    el  reino  de  Cristo y  exaltar el  nombre  de Dios,  no  para  levantar  su  propio  reino.

2Co 13:10  Por esto os escribo estando ausente, para no usar de severidad cuando esté presente, conforme a la autoridad que el Señor me ha dado para edificación, y no para destrucción.

Pablo  reconoce  que  Dios  le  dio  autoridad  para  edificar  a  otros y  no  para  su  propio  beneficio, usted dirige  es para  edificar  a otros,  no para  buscar  su  propio provecho  y  destruir  las  vidas  de los  demás.

El  verdadero servicio   siempre  tiene  un  costo, la  mayoría  de veces  el  siervo  tiene  que  pasar  por  un  doloroso  sufrimiento.

Jesús  dice  que  debemos  ser  líderes siervos,  como  él  nos  dejó   su  ejemplo.

CARACTERISTICAS  DE  UN  SIERVO.

EL  SIERVO  RECONOCE  LA  AUTORIDAD

El  siervo  sabe  que  no  está  edificando  su  propio  reino  sino  ayudando  a otro.  No  discute  con  la  autoridad  porque  esta  consiente  de la baja posición  que ocupa.  Sabe  que  al  superior  se le  obedece y  que  si  se  le  niega  a reconocer su  autoridad pronto  tendrá  que  buscar  otro  trabajo.

No  estamos  edificando  nuestro  propio  reino  sino  el  de  Dios.

EL  SIERVO  NO  TIENE  DERECHOS.

El  siervo  no  exige  sus  derechos  porque  no  los  tiene.  Existe  para  hacer  la  voluntad  de  su  patrón.

Jua 13:15  Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.

Jua 13:16  De cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.

 

El  siervo  no  busca  que  satisfagan  sus  caprichos  o  sus  expectativas,  solo  esta  para  servir.

Un  verdadero  líder  en  cristo  no  está  para  obtener  algo  de  los  demás;  necesitamos  renunciar   a  nuestros  derechos y  dedicarnos  a  servir.  Eres  de  los  que  esperan  algo  de  los  que están  por  debajo  de  usted?. ¿  Nos  enojamos  cuando  no  se  nos  tratan  con  respeto.?

EL  SIERVO  ESPERA  UN  TRABAJO  DURO

 El  siervo  no  está  esperando  descansar  y  sentirse  cómodo; Espera  trabajar  y  trabajar  duro.  Jesús  dijo.

Luc 17:7  »Supongamos que uno de ustedes tiene un siervo que ha estado arando el campo o cuidando las ovejas. Cuando el siervo regresa del campo, ¿acaso se le dice: “Ven en seguida a sentarte a la mesa” ?

Luc 17:8  ¿No se le diría más bien: “Prepárame la comida y cámbiate de ropa para atenderme mientras yo ceno; después tú podrás cenar” ?

Luc 17:9  ¿Acaso se le darían las gracias al siervo por haber hecho lo que se le mandó?

Luc 17:10  De modo que, cuando ustedes hayan hecho todo lo que Dios les ordena, no esperen que él les dé las gracias. Más bien, piensen: “Nosotros somos sólo sirvientes; no hemos hecho más que cumplir con nuestra obligación.”

 

Nadie  solicita  un  trabajo de siervo  esperando  que  todo  sea  fácil. Servir  como  líder  es un trabajo duro. Si  usted   no  está  listo  para  este  tipo  de  trabajo  entonces  se  encuentra  en  el  lugar  equivocado.

EL  SIERVO  NO  ESPERA  QUE  SE LE  RECONOZCA

El  siervo  no  espera  que  se  le  reconozca  o  se  le  aplauda  porque  hizo  un  magnífico  trabajo.  El  simplemente  hace  lo  que  tiene  que  hacer.  Jesús  nos  dejó  esta  enseñanza.

Luc 17:9  Tampoco le da las gracias por cumplir con sus órdenes.

Luc 17:10  De modo que, cuando ustedes hayan hecho todo lo que Dios les ordena, no esperen que él les dé las gracias. Más bien, piensen: “Nosotros somos sólo sirvientes; no hemos hecho más que cumplir con nuestra obligación.”

 

Si somos líderes siervos  que aplicamos  las características  que  el  señor  Jesús  nos  dejó,  estamos  reconocido  la  autoridad de  Jesús  sobre  nuestras  vidas. Seremos  personas  que  no  estamos  buscando  nuestros  propios  beneficios,  y  exigiendo  nuestros  propios  derechos.

-Reconoceremos  que ser  líder siervo  demanda un  trabajo  duro, y  como resultado,  estará  siempre  dispuesto  a trabajar  más tiempo y  más  duro  que  los  demás;  sin  esperar  ningún  tipo  de  reconocimiento

Examina tu vida  si  realmente eres  un  siervo de  Jesucristo,  o  estas  en  la  posición  equivocada.

Los verdaderos siervos de Jesucristo no solo están en el liderazgo de la iglesia, primero deben ser buenos líderes en los hogares, empresas y cada posición donde Dios te haya colocado a trabajar.

 

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